Mientras estaba leyendo un cuento de hadas titulado "Iris" (lirio) por Hermann Hesse, las primeras páginas me recordaron inmediatamente la pintura del lirio de la Maestra. Las hermosas flores azules y violetas con el brillante fondo dorado, crea un efecto surrealista de un aura radiante que queda en la memoria del observador.

Las flores de iris son tan vívidas y llenas de energía, como si estuvieran por estallar de risa y ser una guía hacia interminables aventuras infantiles. Sientes como si las flores se abrieran ante ti con el fin de levantarte el ánimo, como así también de llenar tu corazón con la inocencia de un niño y el entusiasmo por la vida. Esto es exactamente lo que la flor del lirio representa en el cuento de Hermann Hesse: un símbolo de la infancia, "una puerta abierta a través de la cual, el alma si está lista, puede ingresar al mundo interno donde tú y yo, y el día y la noche somos todos uno."

La historia del lirio, es acerca de un joven que adoraba el lirio en el jardín de su familia. Aunque había otras flores en el jardín, el lirio era especialmente importante para él, porque "eso hacía que todo fuera digno de ser contemplado y que todo era milagroso." Con frecuencia miraba fijamente el lirio y quedaba aislado en un estado de ensueño, donde él podía sentir la unidad del Universo y la bendición de la vida.

Sin embargo, cuando el niño creció, él se transformó en un hombre profundamente comprometido con el mundo externo; de esta manera, se olvidó completamente de lo que el lirio simbolizaba. Más tarde, él se convirtió en un estudiante famoso, un profesor respetado por muchos; pero en su corazón, se sentía infeliz e insatisfecho. Este sentimiento comenzó a disiparse cuando fue atraído por una joven especial llamada Iris (lirio).

Su nombre le recordaba algo profundo, distante e importante; pero él no podía determinar, qué sentía exactamente. Eventualmente le pidió a Iris que se casara con él, pero Iris rechazó su propuesta diciendo: "Puedo vivir sin flores y también sin música... sin embargo, hay una cosa sin la cual podré estar, ni estaré: no podré vivir nunca, ni siquiera por un día, si la música en mi corazón no está en el centro de todo lo que hago." Iris le exigió, que él encontrara su ser interno antes de que ella aceptara su propuesta. De mala gana, el hombre accedió y se embarcó en un viaje interno de auto descubrimiento.

Pasaron los años y el hombre desarrolló una nueva sensibilidad por la vida y se enterneció. Pero antes de que él completara su misión, Iris se enfermó y se moría. Antes de morir, ella le dio un lirio y le dijo: "Búscame... busca al lirio. Luego, vendrás a mí." Él continuó buscando. Eventualmente, el hombre redescubrió el sueño de su infancia y, a través del lirio, volvió a llenarse de vida. "Él volvió a cantar suavemente, y su camino ascendió suavemente hacia su hogar."

Me pregunto si ésta es una de las razones por las cuales, la Maestra nombró a su pintura "La Flor en el Corazón No Se Marchitará," porque es el corazón de un niño, es verdaderamente libre y representa el verdadero Ser. De alguna manera, pienso que el cuento de hadas de Hermann Hesse "Iris" y la pintura de la Maestra, representan la misma verdad que está más allá del tiempo y el espacio.

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