El 18 de febrero del Año Dorado 4 (2007), la Maestra Suprema Ching Hai, miembros de la Asociación y otros invitados, dieron la bienvenida al Año Nuevo chino en Hsihu, Formosa, con un importante mensaje de paz, amor y preservación de nuestro bello planeta, la madre Tierra. Una preciosa canción compuesta por la Maestra Suprema Ching Hai, impregnó la atmósfera en esta ocasión festiva y llenó el corazón de todos con amor, compasión y paz.
La inmensa bendición del deseo de Año Nuevo
¡Les deseo a todos buena fortuna, un próspero año, y lo más importante, un año de paz! Le he cambiado un poco la letra para celebrar el Feliz Año Nuevo. Y debemos cantarla con la tonada de "Feliz Cumpleaños":
Feliz Año Nuevo, Cielo.
Feliz Año Nuevo en la Tierra.
Feliz Año Nuevo, todos los seres.
Feliz Año Nuevo en Paz.
¿Ya pueden recordarlo? Bien. Cantemos juntos. (La Maestra y todos cantan). ¡Muy bien! Deseamos que el mundo pueda tener paz. Paz en el Cielo, paz en la Tierra, paz para todos y todos los seres. ¡Al menos para este año! Si nuestro deseo es sincero, puede que se haga realidad.
Todo indica que vamos a tener paz, y muy pronto, de acuerdo con todas las noticias que tenemos hoy. Aunque todavía tenemos un poco de fricción aquí y allá, entre algunos enemigos de alguna reencarnación anterior, ellos están solucionando sus problemas. Pero pareciera que ahora tenemos más paz que nunca. ¿No es así? (La audiencia: Sí.) ¡Sí!
Cada vez vamos a tener más paz. Así es como debe ser, si los humanos tienen que sobrevivir, porque ya hemos causado mucho daño a este bello ser, llamado Madre Tierra. Y espero que tengamos suficiente tiempo para resarcirlo, para corregirlo, para repararlo de alguna forma.
Entonces la paz debe existir, porque en paz, podemos reconstruir países. Sólo en paz, podemos reconstruir las relaciones humanas. Sólo en paz, podemos alcanzar el Cielo. No existe ninguna otra manera en que podamos vivir unos con otros, excepto en paz. Hay cosas más importantes que hacer en el mundo, todos saben eso, que tomar un arma y dispararle a alguien. Esto es lo último en que podríamos pensar. ¡Nunca deberíamos pensar en algo así en toda nuestra vida!
Pero nuestros hermanos y hermanas, han despertado en cierta forma a esta causa urgente, importante y obligatoria, la causa por la paz. Todos hablan de la paz, pero debemos hacer algo para contribuir a ella, amando a nuestros vecinos, dejando de hacer cualquier cosa que pensemos y sepamos que es errónea. Cualquier cosa que sea errónea, dejémosla de inmediato. Cualquier cosa que sea correcta, hagámosla de inmediato.
Esta es una forma muy sencilla de vivir. No hay necesidad de buscar el Cielo en cualquier otro lugar, a menos que estemos en paz con nuestros vecinos y con nosotros mismos. Como les he dicho muchas veces, un muchacho y una muchacha, crecen a partir del amor de sus padres. Han sido amados desde que nacieron, antes de nacer, después que nacieron y mientras crecen, están prosperando y creciendo con el amor de sus padres, sus queridos amigos, su amada esposa e hijos.
Esa es la forma en la que deben crecer y vivir sus vidas, en amor, y entonces en paz. Nadie en la tierra debería transformar ese amor en odio y hacer salir a la gente a algún lugar, para destruir ese amor y destruir el amor de alguien más, que no le ha hecho nada a él personalmente. ¡Eso está mal! Está terriblemente mal, incluso a los ojos humanos, ni qué hablar a los ojos de Dios. No hay necesidad de introducir a Dios en ningún debate, antes de que empecemos a hacer algo bien y a vivir en paz entre todos.
Tenemos muchas cosas urgentes por hacer: tenemos el hambre que resolver, tenemos niños que han muerto de inanición, tenemos ancianos sin atención, tenemos animales que han sido abandonados y abusados. Tenemos todo tipo de pequeños problemas aquí y allá, y grandes problemas aquí y allá, de los que debemos ocuparnos, para que así la vida en este planeta sea más bella.
No podemos permitirnos desperdiciar nuestra energía, tiempo y dinero en matanza. Debemos utilizar nuestro tiempo y energía en amor y en construir la paz. Porque si no detenemos la guerra ahora mismo, todos saben que no tendremos tiempo para nada más. Quizás los ganadores y los perdedores de la guerra, podrían morir antes de que la guerra termine si nuestro planeta se acaba. Ya lo he dicho muchas veces, no es necesario que lo vuelva a repetir.
Sean los primeros en proteger la Tierra
Pero hay una cosa: tengo que agradecerles a los miembros de nuestra Asociación, a lo largo de todos estos años, especialmente en estos años que hemos tenido muchos desastres naturales y causados por el hombre en todo el mundo. Ustedes han sido muy, muy compasivos y muy diligentes, al ayudar a nuestros hermanos y hermanas en necesidad. Así que se los agradezco mucho, y estoy muy, muy orgullosa de ustedes.
Debemos buscar la paz mundial. Si continuamos haciendo la guerra, entonces no tendremos tiempo de reparar este bello planeta. Nuestros hijos, nuestras futuras generaciones, no tendrán un lugar donde vivir. El mundo entero podría ser destruido. Su destrucción puede que no nos cause daño a los practicantes del Método Quan Yin, porque hemos encontrado a Dios y estamos seguros. Sin embargo, debemos preservar este mundo para que nuestros hermanos y hermanas, también puedan elevarse. Si alguien sufre una muerte trágica y repentina, es más difícil para el alma despertar y ser liberada. Eso es lo que hemos estado esperando.
Mientras estamos esperando, debemos enmendar cualquier cosa que podamos enmendar. Nosotros, en particular, debemos ser los primeros en hacerlo. Por ejemplo, tratemos de conservar la energía siempre que podamos. A menudo les he pedido que usen bombillas que ahorran energía y lo hemos hecho. Ahora, si los autos que emiten gases no peligrosos están disponibles, entonces compren uno. Si pueden utilizar un coche en común para ir a trabajar, ir de compras, llevar a los niños a la escuela, etc, desde luego, compartan un coche. De esta forma, podemos conservar energía y reducir las emisiones de gases peligrosos.
En casa, traten de reciclar todo lo que se pueda reutilizar. Por ejemplo, traten de conservar el agua. El agua puede que esté disponible de inmediato, pero necesitamos electricidad para que llegue a la casa. Por lo tanto, abastecer de agua a la casa consume mucha energía. Como así también abastecerla de electricidad. Debemos ahorrar energía siempre que podamos. No es sólo un problema de dinero. Es salvar a este mundo también. No esperen que sus vecinos lo hagan primero. Hagamos cualquier cosa que podamos nosotros primero.
Regresé a Hsihu en taxi. El conductor me hizo muchas preguntas y le di mis explicaciones. Le conté cómo conservo la energía, con el uso de autos que no emiten ningún gas peligroso, que son una innovación. Le dije que soy vegetariana. Ahora las Naciones Unidas, han anunciado que la cría de animales causa las emisiones más peligrosas, así que es bueno que ya seamos vegetarianos. Le expliqué al conductor que la razón principal por la que soy vegetariana es el amor.
Él dijo: "¿Qué sentido tiene ser la única vegetariana mientras otros diez comen carne?" Le contesté: "Sólo puedo cuidar de mi misma primero. Si todos piensan como usted, cada uno esperando que el otro tome la iniciativa, entonces ¿cuándo alcanzaremos la meta? Veo lo que es correcto y lo que es apropiado hacer, entonces lo hago primero. Si mis vecinos están de acuerdo conmigo y siguen mi ejemplo, fantástico. Si no, al menos he hecho mi parte y cumplido mis obligaciones. Si no hago lo que pienso que está bien, y todos los demás piensan de la misma forma, entonces nadie hace lo que es correcto. Muchas personas no hacen lo que está bien y lo que es apropiado, porque se preguntan qué sentido tiene hacerlo si son los únicos que lo hacen y otras diez personas no". ¿Servirá de algo? (La audiencia: Sí.) Sí.
Le dije al taxista: "Por ejemplo, es mejor tener dos o tres luces en una plaza oscura que no tener ninguna. Cuando uno entra a una gran casa a oscuras, y enciende una vela, ¿no puede ver muchas cosas entonces? No importa si la gran casa ha estado a oscuras por miles de años. Una vez que entras y enciendes una vela, puedes ver los alrededores. Luego, cuando otra persona entre y vea cómo la luz ilumina los alrededores, él o ella también encenderán otra vela. Entonces estará más iluminada con las dos velas. Eso es lo que hacemos. Uno tras otro, paso a paso, influenciamos a los demás. No tenemos que decir nada. De hecho, algunas veces hablamos mucho y nadie nos escucha. Algunas veces las personas no entienden con claridad, y algunas veces son pocas las personas que escuchan".
Ahora ustedes producen Supreme Master Television, el cual transmite videos de mis conferencias que datan de hace mucho tiempo. He visto algunos de los programas. "Esa persona habla muy bien", dije. "¿Pero a quién le está hablando? ¿Por qué Ella viaja por todas partes y habla de cosas que pareciera que sólo le importan a pocas personas?" Sin embargo, tenemos que preocuparnos, porque todavía estamos en este mundo. Mientras aún estemos en este mundo, debemos hacer todo lo posible por protegerlo y a todos los seres sensibles de este mundo. Cuando ascendamos al cielo, entonces no será necesario que volvamos a hablar sobre esto otra vez. Sin embargo, mientras estamos aquí, tenemos que reparar y proteger al mundo.
De forma similar, si le has vendido tu casa a alguien más, entonces no hay nada que puedas hacer. Pero mientras aún vivas en tu casa, seguramente tienes que repararla y mantenerla, no sólo para ti mismo, sino por la seguridad de tus amigos también. No es correcto tener invitados en una casa que está destruida o que podría derrumbarse en cualquier momento. No es que las cosas físicas nos importen mucho. Pero en cualquier sitio que estemos, tratemos de arreglar el lugar, no sólo para nosotros, sino también para todo el mundo. En realidad, este mundo físico no es tan importante para nosotros, porque ya conocemos el camino a Casa. Aún si este mundo no existiera, sabríamos que hay billones de otros mundos a donde podemos ir. Pero mucha gente no sabe eso. Así que no tenemos el derecho de destruirlo. ¿Correcto? (La audiencia: Sí.)