El Amoroso Compromiso del Dueño de un Lavadero de Coches de Ayudar a los Jóvenes

El Amoroso Compromiso del Dueño de un Lavadero de Coches
♥♥♥♥♥♥♥ de Ayudar a los Jóvenes

Por el Grupo de Noticias Hsinchu, Formosa (Originalmente en chino)

El Sr. Lin Bo-Chun, dueño de un lavadero de coches en el Condado de Zhudong, Formosa, notó que muchos niños de familias aborígenes, habían dejado de ir a la escuela debido a dificultades económicas o habían huido de los hogares, debido a los problemas por ser criados por sus abuelos. El Sr. Lin, sintió mucha pena al ver a estos niños, abandonados por la sociedad y deambulando por las calles. Entonces, él empezó a ayudarlos. Después de llevar a cabo un censo, entre muchos dueños de casa mediante preguntas, el reunió un grupo de jóvenes con problemas, quienes eran vistos como causantes de problemas por sus familias. Además de suministrarles comida y un lugar para quedarse, el Sr. Lin también los llevaba todos los días a la escuela, les enseñaba técnicas de lavado de coches, y les pagaba sus salarios. En ocho años, muchos jóvenes quienes previamente fueron abandonados por la sociedad, se han beneficiado por su amorosa enseñanza. Ellos no sólo completaron sus estudios, sino también ganaron autoestima y el sentido de logro de sus trabajos. Para alabar el amor y cuidado del Sr. Lin hacia la gente joven, el 4 de agosto Año Dorado 4 (2007), los miembros de la Asociación Internacional Maestra Suprema Ching Hai, le presentaron el Premio Líderes Mundiales Extraordinarios, en nombre de la Maestra Suprema Ching Hai. Es un símbolo de agradecimiento de toda la sociedad, por sus esfuerzos en cuidar a estos jóvenes en desesperada necesidad.

Cuando recibió el Premio, el Sr. Lin Bo-Chun, expresó su gratitud a la Maestra Suprema Ching Hai y humildemente dijo: "Yo sólo estoy cumpliendo con mi parte como miembro de la sociedad... En realidad los niños no han hecho nada malo. El problema es que los adultos de la sociedad, nunca han reconocido positivamente a estos jóvenes. Nosotros no debemos abandonarlos a la ligera. Los seres humanos no somos santos y todo el mundo a veces esta sujeto a errar. No los dejen en una prisión por tres años por cualquier delito menor. En cambio, ¿por qué no darles un buen trabajo?, así se les permite que se prueben a sí mismos... ¡Yo espero que la gente con conciencia en nuestra sociedad, extienda mayor atención a estos jóvenes, dándoles oportunidades y reconocimiento y ayudándolos a recuperar su confianza!"

Cuando se le preguntó sobre el método para educar a este grupo de jóvenes, el Sr. Lin dijo: "Lo primero, debemos tratar de comprenderlos y amarlos; sólo entonces tendremos el derecho de disciplinarlos y educarlos. Al mismo tiempo, debemos saber cuáles son sus problemas, y qué desean ellos profundamente en sus corazones. Sólo entonces, ellos empezarían a aceptar mi consejo". Después enfatizó, que lo más importante es establecer confianza mutua, aceptándolos honestamente y amándolos.

En el día de la entrega del premio, en el lavado de coches del Sr. Lin, nuestro Centro de Hsinchu preparó una serie de actividades, como ver los programas de Supreme Master Television, entregar regalos al Sr. Lin y a sus jóvenes empleados. Los regalos incluían DVDs de conferencias de la Maestra y los álbumes de pinturas, carpetas para documentos de Vida Alternativa, comida bendita, revistas Noticias, bolígrafos impresos con el sitio Web de Supreme Master Television. La ceremonia de la entrega fue seguida por una suntuosa y cálida fiesta vegetariana.

Es nuestra esperanza que más gente aprenda del ejemplo del Sr, Lin Bo-Chu y unan sus manos, para ayudar a los jóvenes de la sociedad que están privados de amor y afecto.