Toni Ruttiman vive una vida de valentía, amor y devoción. Desde que presenció un gran desastre en 1987, su llamado ha sido el de construir puentes para los menos afortunados, en poblaciones en el sudeste de Asia y en América del Sur. Mientras viaja para supervisar sus proyectos de construcción de puentes, Toni únicamente puede cargar con ropa y una computadora portátil. Acerca de su trabajo, él comenta: "Construir puentes para gente pobre es la forma en que expreso mi amor por este mundo y las personas que viven en él". (Por favor consulte la Revista Noticias #192 para la historia detallada.)

Recibo del Sr. Ruttiman por los US$ 10.000 contribuidos por la Maestra.

Por su noble servicio, Toni y su compañero, Wálter Yañez, fueron honrados con el Premio a la Compasión Mundo Resplandeciente de la Maestra Suprema Ching Hai, junto con US$ 10.000 para ayudarles con sus proyectos. Al recibir la noticia el 11 de diciembre del Año Dorado 4 (2007), Toni compartió estas palabras:

"Me gustaría agradecerle a la Maestra Ching Hai por esta carta tan hermosa que me envió ayer. Realmente conmueve el corazón de este constructor de puentes. También, ¡por favor acepte nuestra gratitud por su tan generosa donación de 10.000 dólares! Esto es más que suficiente para al menos 4 puentes en Ecuador, para aproximadamente 6.000 personas o más. ¡En nombre de ellas y en el nuestro, muchas gracias por su generosidad!"

Gracias, Toni y Walter, por inspirarnos a través de vuestras nobles contribuciones a la humanidad. Que Dios bendiga todas vuestras labores futuras de construcción de puentes.

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