El mundo sensible de los animales

 

Los animales honran el Poder de la Maestra

Por la hermana iniciada Betska, Brentwood Bay, Columbia Británica, Canadá
(Originalmente en inglés)

Vivimos en un pequeño pueblo en la Isla de Vancouver, Canadá, donde los venados deambulan por las calles como espíritus libres. ¡Después de todo, ésta fue su tierra antes de que los humanos la habitaran! Las personas y los venados viven juntos en armonía. Los coches disminuyen la velocidad mientras estas adorables criaturas cruzan el camino.

Las casas de nuestro pueblo, suelen tener zonas con pasto en los patios delanteros y traseros. Y los lugareños están orgullosos de sus jardines con flores y verduras y los cuidan muy bien para que embellezcan el medio ambiente continuamente.

A los venados les encanta comer muchas plantas de los jardines. ¡La gente incluso toma clases para encontrar las mejores plantas resistentes a los venados! Una de las comidas favoritas de los venados son los tulipanes, que se ven en las fotos de esta página. Cuando están protegidos de los venados con cercas altas, los jardines de tulipanes en una variedad de colores del arco iris son increíblemente bellos.

Nuestro hogar se encuentra en una calle tranquila de Brentwood Bay. Y cada primavera, docena de tulipanes crecen en nuestro jardín delantero, para embellecer y hacer más atractivo el vecindario. ¡Todos nuestros vecinos han tratado de cultivar tulipanes, pero los venados se los comen rápidamente ¡en el desayuno, el almuerzo y la cena! Nuestro vecino de enfrente vino un día a preguntarnos: "¿Por qué ustedes son los únicos que pueden cultivar tulipanes? ¿Por qué los venados no se comen sus tulipanes?" Las personas de la comunidad se detienen a admirar nuestro jardín. Todos parecen asombrados, porque no existen otros jardines sin cerca, en muchas cuadras o kilómetros alrededor de nuestra casa, donde los venados dejen crecer a los tulipanes.

Una noche otra vecina, Kathryn, nos acompañó a un evento especial en los mundialmente famosos Jardines Butchart, cerca a nuestra casa. Mientras caminábamos por los jardines, ella señalaba las muchas variedades de flores y cada vez exclamaba: "¡He tratado de cultivar esas flores, pero los venados se las comieron!" De repente, se detuvo y me preguntó: "Espera un minuto", me dijo, "¿Por qué los venados no se comen ninguna de tus flores?"

Le explicamos que probablemente existían varias razones para ello. En primer lugar, le dijimos que éramos vegetarianos y dado que los animales saben que no los vamos a lastimar, ellos no nos perjudican. Segundo, le informamos que nuestra casa es un centro de meditación. Como sólo hay dos iniciados meditando (mi esposo y yo), con frecuencia recibimos visitantes que vienen a ayudarnos a dar seminarios y que meditan con nosotros. La frecuencia de vibración de nuestra casa y nuestro jardín se ha elevado por la práctica de la meditación y los venados deben sentir el amor que emana de la propiedad.

Kathryn, satisfecha con nuestra explicación, expresó: "¡Bien, creo que podría volverme vegetariana porque me encanta el tofú!"

Lo que no le dije a Kathryn es que hay una foto admirable de la Maestra Suprema Ching Hai que cuelga discretamente de uno de los arbustos al frente de nuestra entrada para autos. En un principio la había colgado allí para proteger nuestra casa. ¡Con frecuencia me he preguntado si los venados pueden sentir la bella energía de Su foto y por esa razón son respetuosos con todo lo que está alrededor de Ella, incluidos los tulipanes!

Esta historia nos ofrece una simple demostración del poder de la meditación y de cómo el poder de la Maestra crea un bello campo de energía alrededor de nosotros. ¡Le estoy agradecida a los venados por su amorosa bondad al permitirme cultivar los tulipanes más espectaculares! También le estoy agradecida a la Maestra por mostrarles a nuestros vecinos el poder de ser vegetariano y un practicante del Método Quan Yin.